El porqué de pedir los apuntes o preguntar algo de clase a una chica.

 Todo el mundo sabe que los hombres según que cosas no podemos hacerlas bien.

 Dios nos diseño de tal manera que podemos, por ejemplo, eructar el abecedario, regular el sonido de los pedos o comer palomitas tras habernos rascado los genitales, pero aparte de este tipo de cosas súper importantes para la supervivencia del ser humano, Dios, como ya dije en el post Vaya huevos... no nos hizo demasiado atentos y preocupados.

 Un hombre te puede decir que jugadores marcaron los goles en la final de la Champions de 2006, que por cierto ganó el F.C. Barcelona,  en el minuto en los que hicieron estos o incluso con que pierna y parte del pie chutó el hombre. Sí, pero un hombre no se puede acordar de que examenes tiene la semana próxima o de que página y para que día es el trabajo de una asignatura. Por su puesto, un chaval tampoco va a tener los apuntes completos para el día del examen y, en el caso de que los tenga, los tendrá mal copiados o con una letra completamente ilegible.

 El otro día nos pusieron un trabajo de castellano que por su puesto, al no apuntarmelo en la agenda* (que dices, ¿Agenda? ¿que es eso?) olvidé de que página había que extraer las preguntas y todo lo concerniente al mismo. Este problema tenía que solucionarlo. Entonces opté por preguntar a los compañeros.

 

 Al primero que pregunté fue a Miguel. Craso error.

Isma: ¿En qué página están los ejercicios del trabajo de castellano?

Miguel: ¡¿Qué trabajo?!

 Tras la decepcionante y preocupante respuesta del primer amigo fui a preguntárselo a otros.

Isma: Eh tío, ¿sabes de que página son los ejercicios del trabajo de castellano?

Alumno 2: Me parece que de la página 234.

Isma: Pero si el libro sólo tiene 190. 

Alumno 2: Eso será el tuyo. Me voy a Educación Física que llego tarde.

Isma: Pero si en segundo de bachiller no tenemos educación física.

Alumno 2: No, ahora estaré loco, no te jode.

  (Entonces vestido de payaso y con una media en la cabeza, se metió en un cubo de basura y empezó a patalear )

 Cansado de no obtener una respuesta satisfactoria decidí preguntárselo a una chica a la que solamente le hizo falta consultar su agenda para decirme: 

 - El trabajo es de catalán y no es de ninguna página, hay que leerse un libro y se entregaba ayer.

 Y hoy, con catalán suspendida con un maldito 4, o 3 mañana me lo dirán, me despido de todos vosotros.

* Apunte para los hombres. Agenda: Libro o cuaderno en que se apunta, para no olvidarlo, aquello que se ha de hacer.